Acidez de estómago

Hola Puntillers.

Hoy, la entrada, es una "carta" que necesito escribir para cerrar un ciclo. Así que no me hagáis demasiado caso. Es pá mi ex, el murciano farmacéutico.

Acidez de estómago. Eso es lo que me pasaba, cada vez que pensaba en ti.

La acidez de estómago se produce cuando no se es capaz de digerir algo y ha de subir la cantidad de jugos gástricos, dentro del propio órgano, y te llega casi hasta el cerebro.

Aún no te había había "digerido".

Soy coach (y reflexivo por naturaleza) así que empecé un proceso de preguntas poderosas para entender qué me pasaba con tus recuerdos y lo que desencadenaban en mi cuerpo.

Si algo he aprendido, tras toda la psicoterapia, es que HAY QUE ESCUCHAR AL CUERPO.

¿Por qué tus recuerdos me producían ese malestar?

¿Por qué se me revolvía el estómago cada vez que pensaba en nuestra relación?

Pues ya lo sé.

Fue una conversación. En concreto una palabra.

Aquella noche en Valencia, en la que nos vimos para cenar, tras muchos meses desde nuestra ruptura, hablamos de muchas cosas y también de cómo me encontraba tras ser diagnosticado con depresión y ansiedad.

En ese momento yo estaba estudiando Docencia de la formación profesional para el empleo. Estaba, poco a poco, retomando mi vida, y tus palabras fueron "me alegro de que ya estés espabilando".

Una persona no "espabila" de la depresión (nenico, que eres farmacéutico!! Qué vendes antidepresivos en tu farmacia de Calasparra!!!). La salud mental y emocional es mucho más que "espabilar" tras una siesta.

Una persona, para sobrevivir a una depresión, necesita asistencia psiquiátrica, asistencia psicológica y toneladas de paciencia.

El verbo no es espabilar.

Igual tendrías que espabilar tú y reflexionar sobre qué palabras utilizas cuando hablas. Te recomiendo buscar contenido sobre EL PODER DEL LENGUAJE. Principalmente porque trabajas cara al público y no te vendrá mal el aprendizaje.

Por esa palabra, el último recuerdo contigo es amargo, desagradable y ácido. De ahí que mi estómago diese vueltas de campana al recordarte.

Esta entrada es para cerrar ese ciclo.

Ya no formas parte de mi vida. Pero estoy empezando la etapa final del duelo post ruptura, en la que la razón colabora para que aparezca la frase THE END (como en las pelis clásicas).

Ya no tengo acidez.