Hola a todas!
Aquí me tenéis, escribiendo el blog desde casa con un gripazo del tamaño de las nalgas de J.Lo.
Estoy malo malísimo, me duele hasta la foto del carnet de manipulador de alimentos, pero no puedo escapar a mi misión de arrojar luz sobre el delicado mundo de las tendencias. Tan importante y decisivo en nuestras vidas que, si no las tenemos claras, no podemos seguir con nuestra vida normal y somos incapaces de salir de casa con la cabeza bien alta. ¿Qué sería de nosotros sin las tendencias?!?!?!
Estoy malo malísimo, me duele hasta la foto del carnet de manipulador de alimentos, pero no puedo escapar a mi misión de arrojar luz sobre el delicado mundo de las tendencias. Tan importante y decisivo en nuestras vidas que, si no las tenemos claras, no podemos seguir con nuestra vida normal y somos incapaces de salir de casa con la cabeza bien alta. ¿Qué sería de nosotros sin las tendencias?!?!?!
La de hoy no es apta para diabéticas: COLORES PASTEL.
Nunca he sido de colores pastel. Será mi herencia árabe o haber nacido en el Mediterráneo, ser valenciano y diseñador de moda te tiene que condicionar.
Me da la sensación que, los colores pastel, se quedan a medio camino, que son un "quiero y no puedo". No soy quien para juzgar los colores pastel teniendo en cuenta que prefiero mezclar estampado de leopardo con dorado, fucsia y pistacho, un poco de lentejuelas y algún salpicón de "ejvarosquis". Siempre me he sentido más próximo a Ana Obregón que a Isabel Preysler.
Pero bueno, sigamos. Lo bueno que tienen este tipo de colores es que siempre acaban dulcificando mucho la imagen de quien los esté vistiendo. Digamos que si quieres aparentar menos edad o pretendes suavizar tu imagen, los tonos pastel son tus aliados (evidentemente eligiendo con acierto las prendas, si te plantas una braga-faja de color rosa pastel, no dulcificarás una mierda, parecerás un putón).
Lo que hay que tener en cuenta es lo siguiente: con los colores pastel QUEDA PROHIBIDO el utilizarlos de pies a cabeza. Es mucho más acertado dar algún toque con ellos en la camiseta, en la blusa, en los pantalones, un cinturón, el bolso, el pañuelo, ... un toque y luego combinarlo con prendas de colores más vivos o más oscuros, según el efecto que quieras conseguir. Eso si, haciendo correctamente las combinaciones de color. Un truco: antes de vestirte, extiende en tu cama las prendas de ropa, quitando y poniendo chaquetas, pantalones, tops,... Haciendo combinaciones hasta que encuentres aquella que más te guste.
Los bolsos son de la temporada pasada pero como se vuelven a llevar los tonos pastel, pues chica a reutilizar. En general no creo que nadie se percatase, bueno, alguna loca o marica muy mala experta en tendencias. Pero a esas les echas un poco de agua bendita y acabas con ellas.
Los colores pastel son muy como de mujer conservadora americana, esposa y organizadora de eventos caritativos. Muy de Bree Van de Kamp, no?
Son como de ser muy comedida, muy correcta todo el rato. Como si no fueses capaz de relajarte en ningún momento.
CHICA, NO TE CORTES Y ÉCHATE UN ERUCTO DE VEZ EN CUANDO!!!!
Por eso te recomiendo que mezcles los tonos pastel con prendas de rollo roquero: chupas de piel, pantalones de tejidos satinados en color negro, zapatos de "chúpame la punta",...
Y mientras decidís que colores pastel son vuestros favoritos, yo voy a tratar de recuperarme de esta asquerosa gripe que me tiene como si me hubiese caído por un barranco, justo después de haber tropezado con Godzilla, tras haberme peleado con la alcaldesa de mi ciudad (un combate que tengo perdido desde el principio), y llevando una semana sin dormir. Vamos, que estoy echo una basura.
Os quiero, os adoro y como estoy hasta el kiwi de las tendencias, la próxima entrada será la última de este tema. Ya está bien por esta temporada, HOMBRE YA!!!
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